martes, 15 de febrero de 2011

Alfonso Cano, máximo cabecilla de las Farc, es el objetivo final




Los escarpados e inhóspitos parajes que conforman el Cañón de las Hermosas son el ‘universo’ en el que se esconde Guillermo León Sáenz, alias Alfonso Cano, máximo cabecilla de las Farc. Un hombre que se está quedando cada vez más solo.
Al mando del general Juan Pablo Rodríguez y el coronel Julio Prieto, las tropas están instaladas en dos bases militares que bautizaron Imperio y Guardián, en cercanías a la vereda Santa Bárbara. Desde allí coordinan no sólo una parte de la ofensiva militar contra ‘Cano’, sino labores sociales con las que buscan ganarse el favor de la población civil.
Los frutos de esta iniciativa integral se vieron la semana pasada, cuando el gobernador del Tolima, Óscar Barreto, regresó a la zona para inaugurar el inmenso colegio que prometió construir un año antes, cuando por primera vez en cuatro décadas un político de esta región pudo pisar esa tierra olvidada.

Gracias a esa presión militar combinada, en el Tolima la Sexta Brigada ha desmantelado el 55% de la estructura de las Farc conocida como Jacobo Prías Alape y, más al sur del departamento, a la cuadrilla 50, que llegó a contar con 110 miembros y cuyos últimos siete se entregaron esta semana, según explicó el coronel Prieto.
De igual forma, la cuadrilla 21 de las Farc se ha reducido en un 25% y la compañía conocida como Héroes de Marquetalia, hace tres meses fue afectada con 13 bajas, entre las cuales estaba su máxima cabecilla Magaly Grannobles, alias Mayerli, quien según la inteligencia militar, “establecía las políticas de seguridad del Comando Central de las Farc”.
De acuerdo con los oficiales consultados, todos los grupos a los que se les ha golpeado representan de alguna manera “los anillos que le brindan protección a la primera cabeza de las Farc”.
Aunque no lo reconocen en público, algunos militares se atreven a afirmar que ‘Alfonso Cano’ se encuentra cercado en el Cañón de las Hermosas y que la avanzada militar lo ha obligado a sortear grandes dificultades.
Pese a ello, aceptan que es una misión muy compleja y que han tenido bajas. “El enemigo lleva 40 años acá, conoce el terreno, cada camino, eso nos dificulta la lucha. Además, está la topografía que va desde los 400 hasta 4.800 metros de altura, hemos tenido soldados con hipotermia, unidades a las que no les podemos llevar los abastecimientos durante varios días por el clima”, explicó el general Herazo.
El objetivo de casi 9.000 hombres es capturar al heredero de Tirofijo o darle muerte si opone resistencia armada. Hay quienes creen que gracias a la presión militar se acogerá a los beneficios del gobierno, aunque en su último comunicado, publicado el viernes en la tarde, ‘Cano’ asegura que no va a rendirse.

No hay comentarios:

Publicar un comentario